Ya puedes visualizar y compartir documentos de OpenOffice y LibreOffice con Google Drive, y editarlos con Google Docs.

Google Drive ha aplicado el soporte para este tipo de documentos, que hasta ahora, no podían ni visualizarse ni editarse directamente en la nube. De momento y según nuestras pruebas, el soporte ofrecido es para documentos de texto creados con Writer, libros y hojas de cálculo creados con Calc y presentaciones creadas con Impress.

La noticia la hemos podido leer en Muy Linux., en donde se citan esta comunicación de Google Drive en Google+ y esta otra comunicación en el blog de Google Apps.

El cambio parece venir propiciado por la reciente decisión tomada por el gobierno del Reino Unido, que definía OpenDocument como el formato oficial de los documentos gubernamentales en UK.

En nuestras pruebas (y esperamos que lo experimentado mejore mucho en breve) el soporte de visualización de hojas de cálculo es muy limitado, y no se permite la edición de las mismas. El soporte para presentaciones también nos ha dado problemas. Tan sólo hemos podido editar (dentro de lo aceptable) y visualizar correctamente los documentos de texto. Tampoco se pueden visualizar ni editar documentos de Draw ni bases de datos, pero esto era de esperar.

La edición de documentos de Writer y de presentaciones genera un nuevo documento de Google Docs, por lo que podemos deducir que en realidad no es una edición en el formato nativo de ODF, sino una importación al formato de Google Docs.

Las modificaciones realizadas sólo se almacenan en el documento de Google Docs, pero pueden descargarse de nuevo en formato ODF.

En cualquiera de los procesos de importación y exportación se pierden muchos atributos y propiedades de los textos, las imágenes y las formas. Los estilos no se mantienen (aunque en la mayoría de los casos sí se mantiene el formato), por lo que en absoluto podemos afirmar que se trae de una edición en formato nativo. Hasta el momento, más nos parece una forma de atraer usuarios de ODF a Google Docs y propiciar su migración.

Así que de momento, coincidimos con los compañeros de MuyLinux y consideramos que estamos muy lejos de un regalo navideño. Nuestro gozo se cayó en un pozo, aunque al menos un poco de felicidad nos ha propiciado, pues quizás, y si la cosa mejora, estemos más cerca de poder visualizar y editar estos formatos de documentos en la nube.